El trabajo de un escritor es metódico, requiere horas de meditación e ingreso en tu corazón y razón para llegar a una frase sugestiva, hilarante y que atraiga la atención. Así pasa también con un compositor y guitarrista que debe ensayar, escribir las líricas y darles vida.7:30 hs : Periodista: desayuno después del despertador, café con leche y tostadas. Preparo mi ropa según el clima y mi humor, me dirijo a la Editorial con mi infaltable MP3 dónde suena “INTERPOL”.
Guitarrista: prepara su ropa para la oficina, impecable traje, café fuerte y caminata para la inspiración hacia el Metro.
9:00 hs : Periodista: Ingreso al trabajo, saludo a todos, busco mi escritorio, mi jefe me busca por que la edición no está completa, le muestro la carpeta y unos escritos a mano, el definitivamente quiere aniquilarme.
Guitarrista: Reunión enseguida, presentación de proyectos, es lunes y nadie está de humor.
13:30 hs: Periodista: Almuerzo en el Parque de enfrente, anotaciones de mi libro a medio terminar –todos tenemos sueños inalcanzables – el cielo está tan azul.
Guitarrista: Almuerzo con compañeros de trabajo, un poco de pseudo relax para la imaginación. En su mente hay una nueva melodía…
18:30hs: Periodista: Final de jornada, las entrevistas están editadas, las fotos quedaron espectaculares, cuándo se espera algo que esté bien jamás esperes las felicitaciones.
Guitarrista: Hora de salida, si no se extiende ésta reunión…
19:30 hs: Periodista: Llegada a casa, un rico café, mucha agua y por fin imprimir más hojas de mi libro.
Guitarrista: Ya en el ascensor se saca la corbata y escucha la guitarra pedirle un ensayo rápido, tal vez una cerveza acompañe…gestiones de reunión de la banda, ensayos programados, sala de ensayo reservada, final del día con alguna otra letra a medio terminar…
23:00 hs: Periodista: Es hora de dormir, las hojas están impresas y ya tiene forma de libro en su página 78, tal vez…se de.
Guitarrista: "Una hora más…éste tema me queda cada día mejor"…
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